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Ibi, en la provincia de Alicante, es la capital juguetera de España. Y para el pueblo es muy importante la tradición de los Reyes Magos. Por esta razón construyeron un centro de interpretación llamada “La casa de los Reyes Magos”, donde los niños podrían aprender la tradición, divertirse y formarse en los valores de la amistad y la generosidad.
Patricia es una marca clásica de calzado que tuvo su momento de auge en los 80 pero que, en la actualidad, había perdido parte de ese impulso. El reto consistió en actualizar la marca y elevar su percepción de calidad sin perder el foco en el antiguo logotipo, que aún persistía en el recuerdo del consumidor. Por esta razón nos limitamos a ligeros retoques en el logotipo, mejorando su construcción y legibilidad, y construimos una imagen a su alrededor basada en el rombo que está presente en éste.
El equipo de Opticoa quería probar un nuevo modelo de negocio óptico. Habían conseguido abaratar mucho los costes de producción, lo que les permitía, por un precio más bajo, apostar por grandes profesionales en los puntos de venta para garantizar la calidad de su producto.
Itaisha vino a vernos porque hacía fermentados a pequeña escala, que empezaba a vender en cooperativas de consumo. Quería escalar su negocio y buscaba impactar con el etiquetado. Tenía claro que quería destacar el lado “más salvaje” de su fermentación.
Lo que empezó siendo el encargo del diseño y la maquetación de un libro (titulado “La cabeza del rinoceronte”) ha acabado creciendo con nosotros, quizás de un modo un poco Frankenstein, poco habitual, pero ha acabado siendo uno de los proyectos más bonitos por los que hemos apostado.
Adriana y Arene nos encargaron el desarrollo de la imagen de Iyali, que era como habían nombrado su centro de mediación y psicoterapia. Una iniciativa impulsada por el deseo de ofrecer un espacio de comunicación seguro basado en la igualdad, sin juicios.
La forma de abordar los proyectos de Alex Filiatreau es un referente para nosotros, y estamos encantados de trabajar codo con codo con ella. Además de participar en algunos de sus proyectos de innovación social, hemos rediseñado su identidad corporativa, renovando su logotipo, su web
Los estudios previos a la creación de la marca nos revelaron tres debilidades en los sistemas de repostaje automatizados de combustible de bajo coste: la complejidad de las máquinas, la ausencia de personal y la infundada percepción de mala calidad del producto. Buscamos combatir estas debilidades a través de una marca inspirada en la sencillez, la cercanía y la calidad.
En esta ocasión nos propusieron crear la imagen de una nueva cadena de autoservicio de lavanderías. No sólo la imagen, también el naming. El estudio previo del mercado nos reveló una debilidad en este tipo de establecimientos: eran fríos, incómodos y poco confortables. Y el público se resistía a utilizarlos por estas razones.
Recuerdo que lo que más tiempo nos llevó a la hora de afrontar este proyecto fue encontrar un nombre, pero conseguimos reflejar la actividad que realiza esta empresa, que antes se llamaba Dopplervet, y buscó un cambio radical a partir de la separación de sus socios.

Ibi, en la provincia de Alicante, es la capital juguetera de España. Y para el pueblo es muy importante la tradición de los Reyes Magos. Por esta razón construyeron un centro de interpretación llamada “La casa de los Reyes Magos”, donde los niños podrían aprender la tradición, divertirse y formarse en los valores de la amistad y la generosidad.

Formamos parte de un equipo encargado de dotar a esta casa de contenido escenográfico. En concreto, nos ocupamos de la imagen corporativa y del diseño artístico. Un diseño colorido y amigable, dirigido al público infantil, con muchas posibilidades para poder extenderse al resto de elementos arquitectónicos.

El logotipo está inspirado en la planta del edificio, con forma de corona, una corona de tres puntas, una por cada Rey Mago, que se entrecruzan y configuran una casa: la Casa de los Reyes Magos.


 

 

Lo que empezó siendo el encargo del diseño y la maquetación de un libro (titulado “La cabeza del rinoceronte”) ha acabado creciendo con nosotros, quizás de un modo un poco Frankenstein, poco habitual, pero ha acabado siendo uno de los proyectos más bonitos por los que hemos apostado.

El libro cuenta la historia de Raúl, una persona con diversidad funcional que ha ido superando muchos retos en su vida a través de su expresión artística: los dibujos en los que plasma su cosmovisión y sus emociones.

De los propios actos de presentación del libro emanaron multitud de propuestas (talleres motivacionales, donde la figura de Raúl explicaba la diferencia en espacios “normativos” e inspiraba a las personas más diferentes en espacios más diversos; exposiciones e incluso colaboraciones para más libros)

Fruto de esas propuestas de colaboración nació un segundo libro (“La nilña algodón”) escrito a 2 manos con David, terapeuta en el centro ocupacional de Raúl y escritor. De la necesidad de producir este segundo libro se constituyó la editorial (“La cabeza del rinoceronte”, que cogió la portada del libro como marca, sin que propiamente se haya hecho un trabajo de marca en este sentido).

El imperativo de accesibilidad de este proyecto nos llevó a hacer una versión de “La niña Algodón” en lectura fácil, y otra en pictogramas, para poder llegar a todo el mundo. Para ello desarrollamos un ecosistema completo de pictogramas con los que poder entender el libro.

También desarrollamos RAQUEL, una app de lectura fácil donde se pueden adaptar todos los parámetros a las necesidades de los lectores.

Verkami recomendó para el crowfounding del cuento una serie de recompensas, productos textiles que desarrolló Cristina, que generó una bellísima línea de productos que se han estado vendiendo en mercadillos y en la web hasta hace bien poco, en que ha llegado un momento en que los padres de Raúl, impulsores del proyecto, no han podido más y han acotado el alcance.

Aunque han desaparecido el resto de los productos, los libros sí que pueden comprarse en la web que explica el proyecto, y que hemos realizado nosotros, mezclando el colorido y divertido mundo de Raúl con la realidad de fotos, productos y servicios puedes visitarla aquí.

Con el tiempo La Cabeza del rinoceronte se ha convertido en un inspirador proyecto social sobre la diferencia.

La forma de abordar los proyectos de Alex Filiatreau es un referente para nosotros, y estamos encantados de trabajar codo con codo con ella. Además de participar en algunos de sus proyectos de innovación social, hemos rediseñado su identidad corporativa, renovando su logotipo, su web (que acabamos de estrenar, puedes verla aquí, y fundamentalmente modelos y plantillas que pueda utilizar en sus talleres y presentaciones)

De la antigua imagen mantenemos el color, Apitropik red, y el círculo rojo, que es su elemento más reconocible, y que utilizamos para destacar elementos.

Dada la naturaleza híbrida de sus propuestas, el trasfondo creativo y artístico de sus metodologías innovadoras y sobre todo la confidencialidad de la mayoría de sus proyectos (pero también la mala calidad en general de sus fotos y materiales gráficos), decidimos utilizar el collage.

Hemos hecho también un rediseño del garabato de Daniel Newman para ilustrar los procesos de diseño, dado el relevante papel que las metodologías tienen en este caso.

Recuerdo que lo que más tiempo nos llevó a la hora de afrontar este proyecto fue encontrar un nombre, pero conseguimos reflejar la actividad que realiza esta empresa, que antes se llamaba Dopplervet, y buscó un cambio radical a partir de la separación de sus socios.

Eccoa remite a la actividad fundamental de una empresa que se dedica al diagnóstico veterinario, que la mayoria de las veces consiste en hacer ecografías a los animales.

 

Las ecografías se realizan a través de ondas sonoras, que están implícitas en la repetición de la c del logotipo (y que reforzamos en las animaciones del mismo). Esta repetición de las CC es la versión más reducida del logotipo, que utilizamos como favicon y como símbolo cuando la ocasión lo requiere

Tanto ecografías como radiografías y electros son en blanco y negro, así que mantuvimos ese criterio en nuestra imagen, aportando como única fuente de color el degradado que aparece en la leyenda de todas las pruebas. En el logo utilizamos el degradado en el claim, en el resto de las piezas es la forma de incorporar color.

En cuanto al universo visual, utilizamos las propias pruebas (radiografías, ecografías, etc.) como fondos de tarjetas, posts, cabeceras…) De forma que la actividad de la empresa queda explicada gráficamente.

El trato humano es muy importante para Eccoa, ya que forman parte del equipo de una gran cantidad de centros veterinarios, por eso nos gustó humanizar los perfiles de los trabajadores mostrando su foto con su mascota 🙂

También hemos diseñado su web, que puedes ver aquí.

Patricia es una marca clásica de calzado que tuvo su momento de auge en los 80 pero que, en la actualidad, había perdido parte de ese impulso. El reto consistió en actualizar la marca y elevar su percepción de calidad sin perder el foco en el antiguo logotipo, que aún persistía en el recuerdo del consumidor. Por esta razón nos limitamos a ligeros retoques en el logotipo, mejorando su construcción y legibilidad, y construimos una imagen a su alrededor basada en el rombo que está presente en éste.

 

Usamos este rombo como punto para crear una serie de texturas y patrones que nos ayudarán a elaborar un universo visual propio y particular, que permitiera a la marca a distinguirse del resto y a la vez aumentar la percepción de calidad.

La idea de los propietarios era expandirse a otros mercados más allá del de calzado, como podía ser el de los complementos o los cosméticos. Por

eso creamos un sistema flexible que pudiera crecer y adaptarse sin perder la esencia.

Itaisha vino a vernos porque hacía fermentados a pequeña escala, que empezaba a vender en cooperativas de consumo. Quería escalar su negocio y buscaba impactar con el etiquetado. Tenía claro que quería destacar el lado “más salvaje” de su fermentación.

 

Diseñamos un logotipo que “fermenta” en sí mismo, explicando el propio proceso de los productos. Este logotipo cambia de color según los productos que acompañe.

Además del logo y las tarjetas, diseñamos un salvaje universo visual, que se plasmó en un par de piezas básicas para empezar con 2 productos (remolacha y zanahoria)… ¡Estamos deseando verlos ya en sus botes!

El equipo de Opticoa quería probar un nuevo modelo de negocio óptico. Habían conseguido abaratar mucho los costes de producción, lo que les permitía, por un precio más bajo, apostar por grandes profesionales en los puntos de venta para garantizar la calidad de su producto.

Esta cadena se desvincula de los costes añadidos de la moda y apuesta por la tecnología para fabricar barato productos básicos de calidad. El mensaje es claro: 3 productos (graduadas, progresivas, sol, sol graduadas), un único precio para cada producto.

 

Apostamos por una imagen que transmitiera la claridad de un mensaje único con un logotipo muy básico y el uso principal del blanco y negro. El logotipo juega con lo que parece un error en el nombre, para reforzar esa idea de que sobra una letra. Esa A que sobra, girada, es un ojo abierto, y jugaremos con esa idea como símbolo constantemente.

La referencia a la tecnología se realizó a través de juegos de lentes que son los que además aportan el color. Estas lentes se recombinan en cada uso y hacen que varíen los fondos.

Para eliminar la referencia a la moda se eliminan también las fotos de posados y los anuncios de marcas en los comercios. Los ejemplos se muestran siempre con gafas reales sobre ilustraciones en blanco y negro.

Opticoa vino con el nombre puesto y las tiendas las ha diseñado un equipo de interioristas pero somos los culpables de todo lo demás (logo, papelería, señalética, piezas de comunicación on y off line… Es un proyecto vivo, que ha abierto una tienda piloto en Tui, donde testamos lo que funciona y lo que no, pero tiene vocación de escalarse a través de franquicias. La próxima pieza, la web, está en construcción)

Adriana y Arene nos encargaron el desarrollo de la imagen de Iyali, que era como habían nombrado su centro de mediación y psicoterapia. Una iniciativa impulsada por el deseo de ofrecer un espacio de comunicación seguro basado en la igualdad, sin juicios.

Iyali significa “familia” en hausa, así que buscamos representar la palabra como tal, como un sistema de relaciones entre letras, hasta cierto punto humanizadas, de forma que recuerdan un sistema familiar

Las pautas de diseño gráfico que les proporcionamos en el manual (fondos naturales, letras amontonadas, iconos con letras en círculos, gama de colores, tipografías…). Se están utilizando tanto en el instagram como en la web.

En esta ocasión nos propusieron crear la imagen de una nueva cadena de autoservicio de lavanderías. No sólo la imagen, también el naming. El estudio previo del mercado nos reveló una debilidad en este tipo de establecimientos: eran fríos, incómodos y poco confortables. Y el público se resistía a utilizarlos por estas razones.

Por este motivo pensamos en convertir cada establecimiento en una extensión del hogar, en un cuarto de lavandería: The Laundry Room, un sitio en el que por fin apeteciera estar mientras se espera a que la colada esté lista. Espacios diáfanos, limpios y, sobre todo, amigables, donde primara el uso de materiales cálidos.

Un diseño limpio y sencillo alejado de las tendencias dominantes

en el sector, donde se incide más en el precio que en las ventajas que supone usar este tipo de lavanderías.

Nos llamaron para lanzar una marca de gasolineras low cost.

Los estudios previos a la creación de la marca nos revelaron tres debilidades en los sistemas de repostaje automatizados de combustible de bajo coste: la complejidad de las máquinas, la ausencia de personal y la infundada percepción de mala calidad del producto. Buscamos combatir estas debilidades a través de una marca inspirada en la sencillez, la cercanía y la calidad.

Las tareas realizadas para este proyecto fueron:

  • Buscar un nombre que representara los valores de la marca(naming).
  • Diseño de logotipo (donde la R es un surtidor).
  • Diseño de un universo visual que incluye la creación de ilustraciones e implantación en los murales de las estaciones, así como en las piezas de comunicación.
  • Diseño de las estaciones de servicio(desde los surtidores a la señal ética).
  • Diseño de piezas de comunicación.